La oposición contra ACTA crece en Bruselas. Una mala idea nunca olerá bien
3 de Marzo de 2010
Al principio era el estricto secreto y la opacidad de las negociaciones sobre el Acuerdo de Comercio Anti-Falsificación lo que causaba un gran malestar tanto entre los eurodiputados como entre la misma comunidad europea funcionarial, cívica y empresarial que trabaja en Bruselas. España no quiere ser la vanguardia del pirateo, ni de la represión. Es la conclusión del nuevo paso del Congreso, con el que llama a corregir la imposición al usuario del canon digital.